¡Un deleite para los ecuatorianos!
Los chontacuros en quichua significa “Gusanos de la Chonta” son parte de la dieta de los indígenas amazónicos, y en los últimos meses se ha difundido en las ciudades para compartir con los turistas y residentes.
El chontacuro se transforma en un gusano grueso luego de ser depositado en el corazón del árbol de la chonta por un escarabajo negro que lleva en sus alas los huevos que posterior a ello se convertirán en larvas. Su nombre varía de acuerdo al idioma de la nacionalidad, en shuar se le conoce como Mundish; mientras que en achuar como Muquindi.
El árbol de chonta en el que crece este gusano tarda entre uno y dos años en desarrollarse hasta alcanzar una altura de 6 a 9 metros con sus característicos espinos puntiagudos en toda su corteza, por lo que es difícil cosechar los frutos manualmente, ante lo cual la mayoría de árboles son derribados al suelo. Allí se desarrollan estas larvas.
EL Gusano de las palmas de chonta, con un promedio de 6 a 7 cm de largo es muy apetecido por su sabor y proteínas, además se le atribuye varias propiedades curativas para el estómago, pulmones, infecciones de la lengua y garganta en los niños, además alivia la tos y el asma, según lo comenta Rebeca Sharup, indígena achuar en una entrevista.
Los nativos suelen consumirlos de forma natural, sin desperdiciar ninguna parte del gusano, se lo puede comer crudo y también se lo prepara en varias formas: asado, fritos o en maitos.
Cuando se les prepara asados se introduce los chontacuros con mucho cuidado en un palo de pincho evitando que se reviente, sal al gusto, también se los puede acompañar con yuca cocinada o frita y ensalada de tomate con cebolla acompañada de jugo de guayusa.
La guayusa es una planta originaria del alta amazonia que se consume por sus propiedades energéticas, antioxidantes y antiinflamatorios.
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